Recuperar la esencia de las casas antiguas es una de las tendencias actuales en la decoración interior. Para conseguirlo, os traemos los mejores suelos para casas rústicas para vuestra vivienda. De esta forma, podréis conseguir el aspecto deseado y volver a disfrutar del calor y de la acogida que transmitían las casas de nuestros antepasados.

Analizando algunos de los beneficios que este material aporta a nuestra vivienda, podemos encontrar varias razones de peso para su instalación. En primer lugar, es un producto natural que no requiere de elementos químicos para su producción. Su fabricación y colocación es más ecológica que cualquier otro pavimento. Por otro lado, nos ofrece una amplísima gama de formatos para instalar en cualquier habitación de nuestra casa y múltiples posibilidades de usos. Así mismo, los acabados también son múltiples y variados, lo que ofrece una imagen atemporal que nunca pasará de moda. Por último, una de las mayores ventajas es su posibilidad de combinación con el resto de solerías y con otros estilos.

Por otro lado, a pesar de ser uno de los mejores suelos para casas rústicas, también encontramos algunas desventajas. La gama sin esmaltes reduce las posibilidades de encontrar un pavimento adecuado. En segundo lugar, su colocación requiere una gran separación entre juntas. Además, su mantenimiento para que se mantenga en unas buenas condiciones es bastante alto. Por otro lado, su terminación es muy irregular tanto en la superficie como en el tamaño de las piezas. Esto lo convierten en un suelo con unas características estéticas particulares que no siempre gustan.

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